Conozcan todos que la gracia sigue a la tribulación, sepan que sin el peso de las aflicciones no se llega al colmo de la gracia. Entiendan que conforme a los acrecentamientos de los trabajos se aumenta conjuntamente la medida de los carísimas. Que nadie se engañe, esta es la única escala del paraíso y fuera de la cruz no hay camino por dónde se pueda subir al cielo. – Santa Rosa de Lima.